12/09/12 (Uruguay) Dos días después del vuelco de un ómnibus interdepartamental en el arroyo Sauce, sobre ruta 7, que dejó dos víctimas fatales, la Comisión de Transporte del Senado aprobó por unanimidad un proyecto que complementa la Ley de Tránsito y Seguridad Vial.
Fue aprobado ayer por la Comisión de Transporte de la Cámara de Senadores un proyecto de ley por el que se prohíbe que los pasajeros viajen parados en los ómnibus que cubren medianas y largas distancias y se establece que deberá haber cinturones de seguridad en todos los asientos.
El 28 de noviembre de 2011 el Poder Ejecutivo envió al Parlamento un proyecto elaborado por la Unidad Nacional de Seguridad Vial (Unasev). El objeto del mismo es la consideración de media docena de iniciativas complementarias de la Ley Nacional de Tránsito 18.191.
El estudio de los senadores llevó a que, por el momento y por varias razones ,no prosperara la idea original de incluir en la norma la disminución de la velocidad del transporte público.
En cambio, se agregaron algunas disposiciones para abarcar no sólo al transporte interdepartamental de línea sino también a lo que se denominan "servicios ocasionales"; por ejemplo, los ómnibus contratados para el transporte de escolares o liceales.
La idea es que los vehículos del transporte colectivo de pasajeros en los servicios que superan los 120 kilómetros de recorrido (o sea los de mediana y larga distancia), posean cinturón de seguridad en todos sus asientos.
Los cinturones deberán ser de tres puntas (es decir bandolero y pélvico) en los asientos de la primera fila, los ubicados frente a las escalerillas o pasillos y los enfrentados entre sí. Los demás asientos deberán poseer cinturones de dos puntas (pélvicos).
Se indica además que en ninguno de estos servicios podrán viajar pasajeros parados.
A estas disposiciones previstas para servicios regulares, en el caso de los llamados servicios ocasionales, ómnibus que no sean de línea sino que se contraten para excursiones o el traslado puntual de estudiantes, las obligaciones deben cumplirse en todas las rutas nacionales.
Los vehículos del transporte colectivo de pasajeros que cumplan servicios ocasionales también deberán poseer cinturón de seguridad en sus asientos. En estos ómnibus tampoco podrán viajar pasajeros de a pie y será responsabilidad de los guardas y/o conductores que las dos cosas se cumplan.
Pablo Inthamoussu, secretario general ejecutivo de la Unasev, dijo a El País que en la reglamentación se podrán considerar excepciones en tanto deberá pensarse en un tiempo de adaptación, como aconteció después de legislar respecto a los sistemas de seguridad en el transporte escolar.
"Ahora tenemos altísimas expectativas de que el proyecto se apruebe como ley", sostuvo Inthamoussu. Para él, el apoyo por unanimidad al proyecto de Normas Varias elaborado inicialmente por la Unasev es "muy significativo y estimulante", considerando que antes no tuvo respaldo de todos los partidos la Ley de Tránsito y Seguridad Vial, aprobada en noviembre de 2007.
El secretario de la unidad, dependiente de la Presidencia de la República, comentó que es fundamental legislar en el asunto, para continuar reduciendo el número de heridos y fallecidos, aunque aclaró que en materia de siniestros de tránsito no hay una gran participación de ómnibus.
A pesar de que éstos se encuentran seis o siete veces más expuestos que otros vehículos, por la cantidad de horas que circulan al día, en todo el país los accidentes con ómnibus llegan al 2,8%.
En cuanto a la incidencia del estado de las carreteras nacionales, tanto las principales y las secundarias, como es el caso de la Ruta 7, Inthamoussu afirmó que faltan estudios en donde se incluyan todas las variables a considerar. No hay investigaciones de por qué ocurren los accidentes, con el detalles, por ejemplo, de los producidos en rutas rectas y en otras con curvas.
El vicepresidente de la Comisión de Trabajo, senador Tabaré Viera, explicó que el proyecto exigió un minucioso estudio de los legisladores, tendiente a considerar los derechos y obligaciones de pasajeros y empresarios.
Norma basada en informe mundial
El Proyecto original de la Unasev hace referencia a las cifras que maneja la Organización Mundial de la Salud en su último informe a nivel mundial. Allí se dice que 1,2 millones de personas fallecen anualmente como consecuencia de siniestros de tránsito y otros 50 millones sufren traumatismos.
En atención al mencionado informe, la propuesta de Unasev -que incluye media docena de proyectos- se sustenta en los conceptos de Grupos de Riesgo y Población Vulnerable.
Dentro de la población vulnerable se toma en cuenta a peatones, ciclistas y usuarios de vehículos con motor, de dos o tres ruedas.
Se considera que estos usuarios corren un riesgo mayor que aquellos que se desplazan en otras modalidades. No obstante se llama la atención sobre quienes utilizan el transporte público, porque ellos "también pueden ser usuarios vulnerables de las vías de tránsito, especialmente en los lugares en que los vehículos de transporte público son inseguros, están abarrotados o carecen de reglamentación".
Entre otras medidas el proyecto original de Normas Varias obliga a los ciclistas a vestir chaleco reflectivo y casco. Se prohíbe el traslado de pasajeros en la caja de los camiones y se establece además que la venta de motos se realice con las mismas ya empadronadas.
CHOFERES Y LESIONADOS
Entre la batería de proyectos manejados por la Unidad Nacional de Vialidad, se ha pensado en la necesidad de organizar un sistema unificado de datos que incluya un registro único de conductores, infractores y lesionados. Para recibir una libreta, luego de dar el examen, el conductor tendrá 100 puntos, que disminuirán según las faltas que cometa. También se ha manejado la pertinencia de establecer un centro de rehabilitación para quienes cometan cierto de tipo de faltas. Igualmente se cree beneficiosa para mejorar la seguridad vial la creación de un Fondo con aportes de las aseguradoras, porcentajes de los peajes y las multas, entre otros. En referencia a los accidentes en donde participan ómnibus, aun cuando estadísticamente se habla de "valores bajos", tanto por el número de siniestros como por el de fallecidos, los niveles de conmoción general que cada uno provoca y el deseo de generar conciencia a todos los niveles demanda nuevas normas de alcance nacional.
Fuente: El País Digital
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