El faltante de combustible comenzó a notarse 48 horas atrás, al inicio del fin de semana, porque el viernes los trabajadores de Ancap decidieron parar las actividades, al enterarse de que el Directorio les descontaría, a unos cien funcionarios, un porcentaje del sueldo por los paros distorsivos que realizaron en protesta por condiciones de seguridad para la descarga de un buque de gas.
Sin embargo, Artigas González, presidente de Fancap, organización en la que están nucleados los trabajadores de la compañía estatal, aseguró que “se estableció una guardia gremial” en la planta de La Tablada (en la afueras de Montevideo, hacia el oeste) para “permitir la recarga, pero nadie lo hizo”. De esta forma se garantizó el suministro para transporte colectivo, policía, bomberos, aeropuerto (donde igualmente hubo algunas cancelaciones y demoras en vuelos), entre otros servicios esenciales.
En las calles de Montevideo había cierto malestar, sobre todo en los taxistas, que debieron hacer largas colas y, en la mayoría de los casos, no pudieron cargar. “Los autos a gas no tendrán problemas, pero los que son a nafta, sí”, dijo un taxista.
Tanto a nivel del directorio como de los empleados, se manejó el tema del desabastecimiento desde distintos ángulos. González estimó que la alta exposición de la noticia en todos los medios de prensa, produjo una “psicosis” en los usuarios que concurrieron en forma masiva a las estaciones de servicio a llenar sus tanques.
En tanto, el presidente de Ancap, Raúl Sendic, hijo de un líder y fundador del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, no dejó de admitir que hubo varias estaciones que se quedaron sin nafta, pero que a esta coyuntura no se la puede llamar desabastecimiento, “porque la gente se volcó masivamente a las estaciones, y a estas horas, está aprovisionada”.
En Fancap aseguraron que hoy cerca de las 9 de la mañana el suministro volverá a la normalidad en Montevideo, y el martes en el interior de Uruguay, por la demora que los camiones tendrán para llegar a los distintos puntos del país.
Aunque para Daniel Añón, de la Unión de vendedores de combustibles, “es difícil que mañana (por hoy) se pueda cubrir el déficit de nafta; recién creo que el martes el total de las estaciones podrán quedar totalmente abastecidas”.
En conferencia de prensa, convocada al cierre de esta edición, Sendic pidió “disculpas” a la población por los inconvenientes ocasionados, y explicó que, a pesar de que se estableció una guardia en La Tablada, “hubo una decisión del gremio de transportistas que decidió no cargar ningún camión de combustible, lo que llevó a que un alto porcentaje de estaciones de servicio se quedaran sin nafta”.
Convocada por el Ministerio de Trabajo, hoy a las 11 se realizará una reunión tripartita, en la que se espera puedan zanjarse las diferencias entre los trabajadores y directorio de Ancap, y así evitar la repetición de este tipo de situaciones. Uruguay importa la totalidad del petróleo que consume y Ancap tiene el monopolio para el refinado y la distribución de los combustibles aunque la venta está a cargo de estaciones de servicio de diversas empresas.
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